martes, 26 de marzo de 2013

Cus Cus

Cuscús: Este derivado del trigo, rico en carbohidratos, se puede cocinar de muchas maneras

El cuscús puede comerse frío o caliente, en ensalada, como primer plato, como guarnición o como ingrediente de postres dulces mezclado con frutos secos, frutas desecadas y especias como la canela y el clavo. Por su sabor neutro, tiene la cualidad de combinar con cualquier alimento: verduras, legumbres, carnes, pescados, mariscos, tofu, seitán, queso, hierbas frescas y especias.

Cocinar el cuscús es muy simple. Primero se dora el grano en la olla, se remueve para que se tueste por igual y no se queme, y cuando se perciba el aroma a tostado y al tacto con el dedo esté caliente, se agrega caldo hirviendo, se apaga el fuego y se deja tapado unos diez minutos. Pasado este tiempo, hay que trabajar el cereal con un tenedor de palo o con las manos siempre muy limpias, para soltar el grano y deshacer los grumos. Se puede aderezar con aceite, hierbas o especias o agregar los ingredientes deseados en función de la receta elegida.

Aporte nutricional

El cuscús es la sémola de trigo duro, mezclada y trabajada con harina y tamizada varias veces hasta obtener los granos de un tamaño característico. Éste puede ser fino, medio o grueso, estar refinado, ser semi-integral o integral. Los granos son de color dorado pálido, de consistencia granulosa y cremosa.
Contiene alrededor de un 12% de proteínas,  el aporte graso es mínimo, apenas el 1%, y el integral  contiene vitaminas del  grupo B y  vitamina E, magnesio, cinc y hierro.

Para mejorar la calidad de las proteínas aportadas, conviene servir el cuscús con preparaciones que incluyan legumbres (lentejas, garbanzos, porotos, habas)
El cuscús  fácil de digerir, por lo que resulta apto para personas con trastornos digestivos, excepto para quienes tienen intolerancia al gluten o celiaquía, ya que es un derivado del trigo.

DIFERENCIAS ENTRE PAÍSES
Hay muchas variedades de guisos con cuscús, dependiendo de los ingredientes utilizados.

En el cuscús argelino, como en cualquier guiso se usan verduras (cebollas, ajíes) y carne de ternera o cordero, pero los fideos o el  arroz al caldo, se reemplazan por cuscús. La  cocina argelina utiliza salsas muy picantes que se sirven aparte.
Respecto al cuscús tunecino, las variantes son numerosas: de cordero, ternera, pollo, verduras, pescado o dulces. El cuscús tiene un aspecto rojizo según sea de Argelia o Marruecos, donde se colorea la sémola con tomate o pimentón. El grano se prepara al vapor en la cuscusera, se pasa por la sartén y se completa con tomate frito, pimentón y salsa picante.

El cuscús marroquí se basa en los aromas más dulzones, por lo que el picante no se utiliza en exceso. Al tratarse de uno de los platos nacionales de la cocina marroquí por excelencia, el recetario es inacabable según la mezcla de ingredientes: carne (cordero, ternera o pollo), verduras y legumbres

Diana Papa Constantino
Bioquímica – Lic. en Nutrición
diana@hablemosdecomida.com.ar
Consultorio Nutricional
Talleres de alimentación saludable (bebés, niños, adolescentes, adultos y familias)

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